Las bolsas de rafia tela de polipropileno son una excelente opción para el almacenaje y transporte de una gran variedad de productos, no obstante, pese a sus excelentes características, hay sectores que no se satisfacen con ellas, debido a la especificidad de sus aplicaciones, como la industria alimentaria. Para esta, se han diseñado técnicas como el laminado, que le aporta notables beneficios, tal como veremos a continuación.
Tipos de laminado
El laminado de las bolsas de rafia de polipropileno consiste en agregar una película adicional de material sobre la superficie de rafia tela y que, usualmente, es de polietileno o polipropileno biorientado (BOPP). Al aplicarse mejora notoriamente las cualidades de las bolsas, como su impermeabilidad, resistencia, durabilidad y capacidad de impresión.
Hay varios métodos para laminar la rafia tela que se usará para la confección de costales o bolsas, siendo los más comunes los siguientes:
- Laminado por extrusión. Conlleva la aplicación de polietileno fundido de manera directa en la tela. Mediante el calor y la presión, se logra una adhesión efectiva en la superficie. Destaca por formar una barrera de larga vida útil contra la humedad y que suma resistencia
- Laminado con BOPP. Aquí se lamina película de BOPP en la superficie de las telas. Al aplicarse, se logra una superficie lisa y brillante, que es buena opción para imprimir imágenes y caracteres con alta calidad. Además de mejorar la apariencia, suma propiedades como la protección contra los rayos UV y la humedad.
¿Qué beneficios generales aporta el laminado?
Al aplicarse esta técnica y mejorar las características tanto funcionales como estéticas de las bolsas, se obtienen notables beneficios, como:
Impermeabilidad
El laminado brinda una barrera altamente eficaz contra la humedad, permitiendo que el contenido de las bolsas quede protegido y ayuda a que se mantenga seco. Asimismo, permite que se coloquen en zonas con alta humedad relativa o en exteriores.
Excelente resistencia
Como mencionamos, añade resistencia. Por ejemplo, esto ayuda cuando se aplica en costales FIBC, aumentando su durabilidad y capacidad de soportar cargas pesadas. Gracias a esto, es que la tela de rafia laminada puede verse en sectores con aplicaciones pesadas, como el de la minería y construcción, que manejan materiales granulares y con formas capaces de romper a las bolsas convencionales.
Mejor apariencia
Al laminarse las bolsas, obtienen una superficie más uniforme y lisa, permitiendo así que la calidad de impresiones aumente notablemente, lo que es ideal para el branding y la promoción de productos, asimismo, para la diferenciación de las marcas y la personalización de sus empaques. Esto puede verse claramente en el sector construcción.
Resistencia a químicos
El laminado evita que las bolsas se degraden a causa de productos químicos, lo que es crucial en entornos industriales y agrícolas.
Protección contra radiación
Como mencionamos, el laminado puede incluir aditivos dotan de protección contra los rayos UV. De esta manera, es posible utilizar las bolsas al aire libre y durante lapsos prolongados. De hecho, es gracias a este aditivo que la tela de rafia usada para fabricar las bolsas puede usarse para la fabricación de lonas de rafia de alta calidad.
Aplicaciones de las bolsas de rafia laminadas en la industria alimentaria
La rafia tela muestra su versatilidad y efectividad cuando se trata de aplicaciones dentro del sector alimentaria:
Almacenaje y transporte de productos a granel
La principal aplicación de las bolsas laminadas de rafia es el almacenamiento y transporte de granos y cereales, ya sea arroz, maíz, trigo y cebada. Al ser muy resistente, permite manejar productos en varias toneladas, además su impermeabilidad asegura que los alimentos lleguen frescos y en óptimas condiciones a su destino, ya sea centros de distribución, puntos de venta u otras empresas del sector para su procesamiento.
Igual se usa mucho para el manejo de harinas y azúcar, debido a que estos productos dependen de una protección adicional contra la humedad y la contaminación cruzada. Asimismo, garantizan que ambos se mantengan secos y luzcan bien para su procesamiento, por ejemplo, en la panificación.
Creación de empaques para frutas y verduras
Se trata de una buena opción para empaquetar verduras frescas. Brindan una solución duradera y resistente al agua, permitiendo que los productos conserven su frescura y no tengan imperfecciones que derivan en notables pérdidas a causa de la proliferación de hongos y bacterias. Además, el laminado permite incluir información relevante en la bolsa y de manera directa, como fechas de cosecha y datos nutricionales. Lo mismo aplica para las frutas.
Manejo de productos procesados y cárnicos
Algunas empresas utilizan las bolsas de rafia blanca para empaquetar productos procesados. El laminado brinda una barrera adicional contra aire y humedad, prolongando la vida útil de los productos hasta su comercialización. Igualmente, suelen usarse para empacar carnes y embutidos, asegurando su frescura y permitiendo el cumplimiento de las normas de inocuidad alimentaria. La impermeabilidad igual evita la pérdida de jugos, preservando así la calidad del producto. Funciona igual para el manejo de leche en polvo y quesos.
Manejo de alimentos para mascotas
Las bolsas laminadas de rafia de polipropileno son perfectas para el empaque de pienso y otros alimentos para mascotas. Facilita igual su transporte y almacenamiento en grandes volúmenes, cuando se utilizan los llamados super sacos.
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