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Toda empresa responsable que utilice sacos gigantes de rafia de precio competitivo (o sacos FIBC, que es la sigla de flexible intermediate bulk container o contenedor flexible intermedio para granel en español) no cometerían acciones que impacten negativamente en la efectividad, apariencia y funcionalidad de esa solución de embalaje y transporte. Hay varias razones más allá de desperdiciar dinero, por ejemplo, evitar daños en los productos finales para el cliente u obstruir la construcción de una buena marca, sin omitir los riesgos de seguridad para aquellos que manipulan los sacos.
Algo que deben saber acerca de los super sacos es que, si se utilizan de forma adecuada, permiten el almacenamiento eficaz y seguro de las materias primas a medida que son movidas en las diferentes etapas de producción o transportadas hacia las instalaciones de otros fabricantes; sin embargo, hemos detectado muchos casos de usuarios que cometen errores durante su utilización. A continuación, mencionaremos cuáles son los más comunes para evitar problemas, como baja productividad, riesgos de colapso o generación excesiva de residuos.
Adquirir super sacos de tamaño incorrecto
Aquellas empresas con amplia experiencia y reconocimiento cuentan con expertos en embalaje (usualmente ingenieros), que aplican controles de calidad rigurosos, entre los que destaca la utilización de sacos FIBC de rafia de precio competitivo. Es por ello que, en su caso, los errores son mínimos, pero, en el caso de las empresas pequeñas o medianas que comienzan a usar las bolsas a granel suelen toparse frecuentemente con un error: adquirir ejemplares de tamaño incorrecto.
Parece un problema pequeño, pero es causante de accidentes. Por ejemplo, usar super sacos de tamaño inadecuado para la aplicación no permite que las cargas y descargas de materias primas se realicen bien, lo que conlleva daños al producto o lesiones potenciales para el personal o los clientes. Afortunadamente, hay algunas medidas para elegir bolsas FIBC de tamaño adecuado:
- Considerar las dimensiones del pallet en el que se colocarán al llenarse.
- Determinar la cantidad de peso que cargarán.
- Definir el peso de las materias primas por metro cúbico.
Probablemente, sea difícil realizar alguna de las medidas mencionadas, por lo que conviene acercarse a un proveedor que les asesore.
Reutilización de los sacos a granel FIBC
En la mayoría de los casos, recomendamos que no se reutilicen las bolsas, debido a que los fabricantes las producen para un uso único y, si se omite esto, sufrirán fatiga rápidamente. Esto no quiere decir que todas las bolsas presentarán necesariamente problemas tras un uso único. En caso de que deseen reusarlas, recomendamos adquirir ejemplares de 6:1, ya que se diseñan para varios ciclos de utilización y traslado.
Tales sacos destacan por su alta resistencia, lo que es ideal para sectores como la construcción, no obstante, consideren que no son diseñadas para usarse de manera indefinida. Recomendamos ampliamente aplicar limpiezas y controles a cada ejemplar cada que los utilicen.
Ahora bien, otra razón por la que no recomendamos que en todos los casos se reutilicen las bolsas es el material residual que dejan, que aumenta las posibilidades de contaminación al trabajar con ciertos materiales, por ejemplo, sustancias químicas y alimentos. La reutilización es una opción para trabajos con grava, arena y ciertas materias primas agrícolas. Consideren que las bolsas son muy económicas, por lo que vale la pena irse por lo seguro y limitar la reutilización.
Desechar las bolsas FIBC
Otro error es tirar aquellos sacos FIBC de rafia de precio competitivo que ya se han utilizado o presentan signos de daños. Según el material con el que eran llenados, es posible reciclarlos, debido a que, en la mayoría de casos, son fabricadas con resina 100% virgen de polipropileno. Ese nivel de pureza es ideal para evitar los riesgos de contaminación y cumplir los requisitos relacionados con empaques en contacto con alimentos u otros productos donde aplica la inocuidad.
La Asociación de Contenedores Flexibles Intermedios a Granel (FIBCA) que opera desde 1983 y se considera como un referente en la industria, no establece una vida útil para las bolsas, pese a que está integrada por expertos. La razón es que la vida útil de los sacos varía según su proceso de fabricación, su almacenamiento, entre otros factores, como la temperatura, humedad relativa y la exposición solar, que impactan negativamente en su vida útil. En este caso, los fabricantes les ayudarán a determinar cuándo desechar las bolsas e, incluso, algunos las compran para reciclarlas.
Ahora bien, debido a que los super sacos usados no se fabrican con polipropileno reciclado, es posible pulverizarlos para transformarlos en resina que puede comerciarse y usarse en otros procesos.
Recomendamos ampliamente que sigan las instrucciones del fabricante para que obtengan los resultados esperados con la utilización de las bolsas FIBC. Si necesitan un proveedor con amplia experiencia y reconocimiento en la venta de este producto, contacten a los expertos de Comercializadora de Polímeros Reciclados. Pidan una cotización a través de la línea (55) 5974 7218, llenen con sus datos nuestro formulario o escríbannos a la dirección: contacto@comercializadoradepolimerosreciclados.com. Les atenderemos en un horario de 9:00 a 18:00 h.
